La enfermera que acompañó a Paquita la del Barrio en sus últimos días ha compartido un conmovedor relato sobre la vida y la muerte de la icónica cantante. Julia, quien estuvo a su lado durante su deterioro, revela que detrás de la fuerte imagen pública de Paquita se escondía una mujer llena de dolor y soledad. En una emotiva narración, Julia describe cómo la salud de Paquita se fue desvaneciendo, y cómo, a pesar de su fama, su último deseo era no morir sola.

Desde su llegada, Julia notó la fragilidad de Paquita, quien, aunque famosa por su voz potente y su valentía en la lucha contra la violencia de género, enfrentaba una soledad abrumadora. La enfermera recuerda las noches en que Paquita luchaba por respirar, sus murmullos de miedo y su búsqueda de compañía. En un momento desgarrador, Paquita le pide: “Abrázame”, revelando que su sufrimiento iba más allá del físico.

A medida que avanzaban los días, la salud de la cantante se deterioraba rápidamente. Julia fue testigo de su último intento de arreglarse para el Día de San Valentín, un gesto que denotaba su deseo de ser vista y recordada. Sin embargo, el 14 de febrero, su condición se agravó y, en un momento de vulnerabilidad, Paquita expresó su miedo a estar sola.

Cuando llegó el inevitable final, Julia fue la única persona presente para sostener su mano. A pesar de la llegada tardía de sus hijos, quienes llegaron llenos de angustia, la gran Paquita la del Barrio se había ido rodeada de un silencio que resonó profundamente en los corazones de quienes la conocieron. Julia, al ser la última en acompañarla, atestiguó no solo la muerte de una artista legendaria, sino también el dolor de una mujer que, a pesar de su fortaleza en vida, anhelaba conexión y amor en sus últimos momentos.

Su historia, marcada por la lucha y la soledad, sirve como un recordatorio de la humanidad detrás de la fama, dejando un legado que perdurará en la memoria colectiva de México. Paquita no solo fue una voz poderosa en la música ranchera, sino también una mujer que, a pesar de sus batallas internas, dejó una huella imborrable en el corazón de su público.